Una muerte demasiado dolorosa

En una lapida triste y gris se encuentra mi mejor amigo, con el que he pasado grandes momentos. No puedo creer que se haya ido. Ha dejado un enorme vacio y es como si la alegria se hubiera ido con el. Su funeral fue el peor momento de toda mi vida. Estabamos alli y sentia que en cualquier momento se iba a levantar, pero sabia, que eso era imposible. Me queria unir a el. El ambiente se fue caldeando, poniendose oscuro y sabia que jamas volveria a ser la misma. Todos los dias vuelvo y le hablo, pero se que nunca le vere de nuevo, y eso me duele mas que nada.