La Felicidad

Quise volar, pero no tenia alas, quise reir, pero no tenia sonrisa, quise ser feliz pero tampoco puede. Crei que podia hacer todo lo que me propusiese, que si de verdad lo sentia, todo acabaria sucediendo. Comprendi que el problema de la felicidad, es que no depende de uno mismo, si no de las personas que quieres, de tener suerte y de estar en el lugar indicado, en el momento preciso.

El corazón

2º Capítulo: ' Cómo le conocí '

Recuerdo que un día el llego al barrio, yo siempre había estado sola, jamas había tenido a nadie, pero cuando le vi, me di cuenta de que nunca volvería a estarlo. Se bajo del coche, y le mire como una tonta, mientras el me hablaba.
- ¡ Hola! Sabes, ¿ Donde esta la calle Herranz Gutierrez ?
Pero, yo le seguía mirando, nunca había visto un chico así  Alto, moreno, con los ojos mas bonitos que había visto nunca, un color verde intenso. Labios carnosos, tiernos, su sonrisa, sus dientes blancos...
- Oye, ¿ Me estas escuchando ? - me dijo tocándome la espalda.
- Huy perdón, no te estaba prestando atención.
- Digo que si me podrías indicar una calle, me llamo Dani, soy nuevo, y no conozco nada. - me tendió la mano.
- Yo soy Sofía, un placer. - la estreche. Bueno, ¿ Cual es la calle que buscas ?
- Herranz Gutierrez.
- Esa calle esta aquí a la derecha, ¿ Vas a vivir allí ?- le pregunte.
- Si, en el numero 14.
- ¡ Que casualidad yo vivo en el numero 13 !
- Seremos vecinos- me dijo con una sonrisa.
- Si lo deseas te acompaño, iba ahora mismo para allá.
- Claro, me encantaría.
Me sentía genial, era la primera vez que conectaba así con alguien. Siempre había estado sola, porque la mayoría de la gente vivía absorta en sus problemas, jamas había podido hacerme amigo de nadie. Y sin embargo, ahora, tenia delante de mi al chico perfecto.
- Bueno, ¿ Cuantos años tienes ? - me pregunto.
- Tengo 16 años, ¿ Y tu ?
- También 16. Bueno esta es mi casa, espero verte de nuevo.
Se fue corriendo; y a los dos segundos regreso sobre sus pasos, y me dio un beso en la mejilla. me miro, y se metió en su casa.Yo me puse colorada, aquel beso removió todo mi estomago. Y después me puse a saltar como una tonta. Voltee la mirada sobre su casa, y me pareció ver a alguien en la ventana mirando. ¿Era una sombra, o de verdad alguien me miraba ? Me quede unos segundos observando aquella casa. Una casa grande, con unas cuatro habitaciones, un tejado rojo, dos puertas, la de la entrada circular y la puerta trasera.  Varias ventanas a los lados y al frente. Un pequeño jardín al fondo y un desván. Volví a mi casa saltando de alegría y entonando una dulce melodía. Así fue como conocí a Dani. Sin embargo el destino me tenia algo preparado.